En tiempos de crisis y de pandemias el ser humano siempre se pregunta ¿Por qué Dios no interviene? ¿Cuál será el propósito de Dios con su creación? ¿Cuál es la esencia misma de Dios? ¿Estaremos destinados a la muerte? ¿Es Dios el causante de la enfermedad? ¿Por qué las plagas? ¿Cómo Jesús nos manifiesta al Dios de la vida? ¿Qué finalidad tienen los milagros de Jesús? ¿Envía Dios el COVID-19? ¿Es Dios indiferente al sufrimiento? ¿Está Dios presente con las personas enfermas por el COVID-19? En este curso intentaré dar respuesta a estas preguntas desde el punto de vista bíblico, con la finalidad de descubrir a un Dios que se solidariza con todas las personas infectadas por el COVID-19.

Este taller ayudará a entender la importancia del rito o ceremonia que Jesús realizó con el ciego de Betsaida en Mc 8, 22-26 para entenderlo en su contexto social, político y religioso del siglo I. Además, analizaremos algunos aspectos como la importancia de los ritos, la mano, la saliva, la visión del ciego y su misión.

​Hacernos conscientes del origen de las enfermedades y catástrofes que azotan al mundo como fenómenos que no pueden atribuirse a castigos divinos o como resultado de la ira de Dios ante el pecado del mundo. (Estas creencias son el resultado de mitos antiguos que nada tienen que ver con el Dios que nosotr@s conocemos o deberíamos conocer. (Gn. 1 “Y vio Dios que era bueno; Gn. 2 donde Dios puso al hombre en un jardín donde tenía todo lo necesario para su sustento; Gn. 3 mala interpretación del texto que pone a Dios como castigador y no al humano que al adquirir más y más conocimiento crea para el mismo una ética de pudores, vergüenza y responsabilidades y consecuencias). Y aunque no vamos a entrar en estos textos de lleno pues serían material para otro curso, si los tendremos en cuenta por la importancia de su contenido donde nos dice desde el inicio que Dios lo hizo todo incluyéndonos a nosotros y ¡VIO QUE ERA BUENO!